Los trabajadores de la planta de camiones de Kentucky se reunieron con el presidente del sindicato, Shawn Fain, en vísperas de la huelga de brazos caídos. Esta planta superrentable se sumó abruptamente a la huelga esta noche después de que Ford no mejorara su oferta económica. Foto: Luis Feliz León
Escalada de los trabajadores del automóvil: Huelga sorpresa en la fábrica de camiones Ford de Kentucky
Keith Brower Brown
A l´encontre, 13-10-2023
Traducción de Correspondencia de Prensa, 16-10-2023
Cada viernes de las últimas cuatro semanas, los consejeros delegados de las 3 Grandes han esperado con ansiedad a que el presidente del sindicato UAW (United Auto Workers), Shawn Fain, anunciara qué departamentos de qué fábricas serían los siguientes en declararse en huelga.
Pero el miércoles 11 de octubre por la tarde, sin previo aviso, el sindicato asestó un fuerte golpe: en diez minutos, la UAW anunció el cierre de la principal planta de camiones de Kentucky (Louisville).
La planta de 202 hectáreas, situada en las afueras de Louisville, es una de las más rentables de Ford, ya que produce todoterrenos de gran tamaño y la gama de camiones comerciales Super Duty.
«Aquí generamos casi la mitad de las ventas de Ford en Estados Unidos», explica James White, que trabaja en la planta desde hace diez años.
Los 8.700 huelguistas se suman a otros 25.000 que ya están en huelga en las plantas de montaje y en los centros de distribución de piezas de todo el país, en el marco de lo que se ha dado en llamar huelga escalonada («Stand Up»).
«Tendrán que olvidarse de la planta de Kentucky»
Según una fuente de la UAW, desde hace quince días Ford afirma que aún tiene elementos que añadir a sus propuestas en el marco de las negociaciones e iba a presentar una contrapropuesta al sindicato.
Sin embargo, durante las negociaciones del 11 de octubre, la empresa presentó el mismo paquete que antes al sindicato.
«Si eso es todo lo que tienen para presentarnos, las vidas de nuestros miembros y mi apretón de manos valen más que eso», dijo el presidente Shawn Fain a los negociadores de Ford. «Con esto, acaban de ‘perder’ la planta de camiones de Kentucky… Hemos escuchado lo que ustedes han dicho. [El vicepresidente] Chuck [Browning] y yo tenemos que hacer una llamada». Shawn Fain y Chuck Browning abandonaron bruscamente la mesa de negociaciones para llamar a los dirigentes locales. Los trabajadores iniciaron la huelga a las 18h30.
«No hay aire acondicionado, sólo dos botellas de Gatorade»
Esta planta empezó a funcionar en 1969. Rápidamente se convirtió en la piedra angular de la estrategia de Ford para asegurarse lucrativos clientes gubernamentales y comerciales. Una larga gama de volquetes y hormigoneras conocida como la «serie L», por Louisville.
Dentro de las vetustas instalaciones, la preocupación por la seguridad ha aumentado a medida que los veranos se vuelven cada vez más calurosos. «La gente se va la planta porque hace demasiado calor», explica White. La respuesta de la dirección fue: «Les vamos a dar dos Gatorades [bebidas deportivas producidas por PepsiCola]». Vi a una mujer desmayarse, y el capataz pasó literalmente por encima de ella para que la línea siguiera funcionando».
El año pasado, Ford prometió 700 millones de dólares para ampliar la planta en los próximos cuatro años, incluida la posible incorporación de versiones eléctricas de sus SUV. Pero los trabajadores lamentan que la planta siga sin tener aire acondicionado, ni siquiera cafetería, mientras que la cercana planta de montaje de Louisville los tiene desde hace años.
Preparados para la huelga
El Local 862 de la UAW en Louisville no era, a principiosd e año, ni mucho menos, un bastión del movimiento de reforma sindical [Unite All Workers for Democracy-UAWD, la combativa corriente sindical dentro de la UAW] que llevaría a Shawn Fain a la presidencia en marzo de 2023. Casi dos tercios de los miembros con derecho a voto apoyaron a los candidatos del Caucus de Administración [la histórica estructura de liderazgo de la UAW que postuló a Ray Curry, en el cargo desde 2021, contra Shawn Fain; Curry perdió por escaso margen la votación mayoritaria].
Sin embargo, en agosto, los dirigentes sindicales locales ya estaban organizando piquetes. Muchos se inspiraron en los Teamsters, que acababan de utilizar los piquetes para enfrentar a UPS -el gigantesco centro UPS Worldport está en Louisville, de camino a la planta- y lograr importantes resultados.
Cuando empezó la huelga «Stand-Up» en septiembre, White dice que muchos de sus compañeros estaban dispuestos a ir a la huelga, «ahora mismo».
Estaban exasperados por las propuestas irrisorias de la dirección de Ford. «Dejen de darnos migajas cada vez», dijo White. «Sabemos que pueden darnos todo lo que reclamamos. Eso es lo que nos deben. El aumento del 40% que se otorgaron a ustedes mismo [en los beneficios de los ejecutivos] se consiguió gracias a nosotros; pueden entonces darnos un aumento del 40.»
En las primeras semanas de huelga, los miembros de la planta de camiones de Kentucky respondieron al llamamiento de la UAW: organizarse para rechazar las horas extraordinarias voluntarias.
White, que trabaja a jornada completa y tiene un segundo empleo en el sector de la seguridad para mantener a su familia, explica que a algunos miembros les ha resultado difícil renunciar a esa paga extra [horas extraordinarias]. La explosión de los costos locales de la vivienda ya había dejado sin hogar a algunos miembros y obligado a otros a vivir más lejos, a una hora y media de transporte.
A pesar de este difícil contexto, los afiliados seguían dispuestos a ir a la huelga. Una hora antes de ser convocados, los trabajadores de la planta ya estaban preparados para la acción.
«Quieren que la situación cambie para siempre», explica White. «Quieren que sea como la Boston Tea Party. 1 Tienen la impresión de que éste sería el último movimiento en el tablero para que el director general [Jim Farley, de Ford] se vaya».
(Artículo publicado en Labor Notes, 11-10-2023)
Nota de A l´encontre
- Alusión a la revuelta política de Boston contra el Parlamento británico en 1773. Fue un acontecimiento clave en la Revolución Americana, que precedió a la Guerra de Independencia. ↩