Venezuela – Ni gobierno, ni patrones. Sindicalistas por una coordinación nacional autónoma para la lucha. [Encuentro – Aporrea]

Aporrea, 12-5-2019

Correspondencia de Prensa, 16-5-2019

El viernes 10 de mayo, se realizó un Encuentro de Trabajadores y Trabajadoras en Lucha en el auditorio de Ingeniería de la UCV (Universidad Central de Venezuela), convocado por iniciativa del sindicato de los trabajadores de esa Universidad (SINATRA) y de su Secretario General, Eduardo Sánchez.

Este evento fue llamado por sectores que se plantean la recomposición y reorganización autónoma de los trabajadores para la lucha, con independencia frente al patrono-gobierno y frente a la patronal privada y sus expresiones políticas (trátese de Maduro o de Guaidó).

Estos sectores sindicales decidieron separarse de la Intersectorial de Trabajadores de Venezuela (ITV) creada a finales del 2018 en medio de una dinámica de movilización laboral, a raíz de que en 2019, varios de los dirigentes que la encabezaban cayeron en una deriva contraria a la independencia de clase y comenzaron a manipular las luchas reivindicativas y defensivas de los trabajadores, para ponerlas al servicio del plan de Guaidó, llegando incluso a apoyar su reciente intentona golpista con auspicio del gobierno imperialista de Trump y más aún, con un llamado directo a la invasión del país por fuerzas militares extranjeras de los EE.UU. Los congregados el 30 de mayo en el encuentro rechazan y se deslindan tajantemente de esta orientación que consideran contraria a los intereses generales de la clase obrera.

Asistieron a la jornada más de 130 luchadores sindicales y laborales, como parte de unas 30 delegaciones de regiones y organizaciones sindicales del país. Entre los sectores representados, además de los trabajadores universitarios, se encontraban dirigentes sindicales del Metro de Caracas, FOGADE, petroleros, principalmente de Anzoátegui, de la Refinería de El Palito (Carabobo), caucheros, autopartistas, MACUSA, docentes, vigilantes, empresas abandonadas por los patronos y ocupadas por sus trabajadores, aeroportuarios del estado Vargas, una delegación numerosa de trabajadores de Aragua, corrientes político-sindicales clasistas con activistas de Marea Socialista, PSL (Partido Socialismo y Libertad) LTS (Liga de Trabajadores Socialistas, JOC (Juventud Obrera Cristiana-Católica), y comunicadores obreros y populares de Aporrea.org, «La Izquierda A Diario» y «laclase.info», entre otros participantes que no alcanzamos a identificar.

En la apertura del Encuentro, Eduardo Sánchez, Sec. General de SINATRA (trabajadores universitarios) denunció el sabotaje de las autoridades de la UCV a la realización de la plenaria, al entorpecerla forzando el cambio consecutivo de las salas y auditorios autorizados para su realización: primero la Sala E, que luego les fue negada, después la Sala de Conciertos, que luego les fue negada, más tarde el Auditorio de Humanidades, que posteriormente les fue negado, y finalmente el Auditorio de Ingeniería donde afortunadamente se pudo realizar, aunque con limitaciones incómodas de horario para el uso de salones por las mesas de discusión y abandono del auditorio a las 4 PM. Algunos participantes comentaron que esto demostraba las «patas cortas» de la democracia que pregonan las autoridades de la UCV que, según los trabajadores, sólo vale cuando se trata de actividades funcionales a Guaidó y a la oposición de derecha golpista, pero que ya no funciona cuando se trata de actividades independientes con agenda propia.

Pero por otra parte también hubo inconvenientes para la participación de dirigentes sindicales de Carabobo, que mantienen luchas obreras en ese estado y fueron objeto de detenciones por parte de la policía regional, por lo que algunos no pudieron incorporarse a la discusión pautada.

La introducción del evento estuvo a cargo de César Mogollón, del sector público (viene de trabajar en Fundacomunal), seguida de las exposiciones centrales de Eduardo Sánchez (SINATRA-UCV), Horacio Silva (refinería de El Palito), José Bodas (petrolero) y Tony Navas (salud).

Mogollón llamó a la clase trabajadora a tomar la vanguardia de las luchas, no sólo de las propias, en lo sindical, sino también de la lucha nacional frente a la «polarización».

Sánchez planteó como propósito del Encuentro la definición de tareas en torno a objetivos comunes frente a la situación crítica para los trabajadores, creada por el capital, porque en el país estamos sufriendo lo que han venido viniendo los trabajadores en América Latina y en el mundo con la descarga de la crisis, tanto por los gobiernos neoliberales como por otros que aparecen como «blandengues».

Comparó la situación de los trabajadores en los inicios y desarrollo del proceso bolivariano, caracterizada por una serie de conquistas, con lo que considera que es la mayor crisis que hemos vivido con Nicolás Maduro, producto de que nunca se plantearon realmente el camino del socialismo a través de la lucha de clases, y de que esta dirigencia política sólo busca su sobrevivencia como grupo, así sea llevándose por delante conquistas que no sólo son del proceso bolivariano, sino que vienen de mucho más atrás.

Como ejemplo, Sánchez puso el de las prestaciones sociales, que «fueron robadas una vez y luego recuperadas parcialmente», para terminar ahora nuevamente «eliminadas por la reconversión de Nicolás Maduro». También mencionó como conquistas destruidas por el gobierno, las cajas de ahorro, los contratos colectivos… aparte de lo ocurrido con la rebaja del salario real y de los tabuladores.

Rechazó que por luchar contra estó «seamos tildados de guarimberos o primperialistas, o que se busque la justificación de que estamos en una guerra». Denunció que la causa de todo esto, entre otras cosas, está en «la corrupcción que se llevó más de 560 mil millones de dólares», junto con «la lógica del rentismo, que otorga la mayor parte de los recursos a las transnacionales», algo que sucedió, según dijo, incluso estando Chávez. Conectó esto con el surgimiento de «nuevas estructuras empresariales», de la «mal llamada boliburguesía».

Dijo el Sec. De Sinatra-UCV, que «estamos atrapados en el chantaje… de una pelea entre capitalistas por el control de las riquezas y el poder contra el gobierno actual, porque no tienen diferencias ideológicas reales».

Mencionó que mientras a Guaidó se le atribuye un 34 % (del electorado) y a Maduro un 15 %, el 51 % restante no quiere a ninguno de los dos. Pero no se le da peso en las decisiones, dio a entender. Y señaló que sectores militares son los que vienen actuando con mayor influencia, incluso a espaldas de Maduro, mientras no se permite que surja nada en el medio de la polarización.

Esta polarización también se llevó a la ITV, penetrada por la oposición (de derecha) para atar la lucha de los trabajadores a los intereses de Guaidó, aunque cuando se declara contra eso, ellos nos califican de que estamos con el gobierno. Pero nuestros objetivos de clase no los representan ni unos ni otros, ninguno de ellos. Y tampoco nos pueden amarrar a una «revolución» que ya no existe, ni nos pueden atar al FMI, como quieren los otros (los que siguen a Guaidó), agregó Eduardo Sánchez.

«Nosotros queremos sindicatos que sean instrumentos plurales de la clase (trabajadora), construir sus instituciones de lucha, que puedan avanzar más allá, a la lucha por una sociedad sin explotados y sin explotadores».

En el desarrollo del resto de su exposición, se refirió a que las políticas del gobierno «están creando mano de obra barata para las transnacionales» y a que como trabajadores estamos por la no intervención, refiriéndose al papel de las potencias como Estados Unidos que se entrometen en los asuntos de Venezuela.

Respecto al tema del salario, comentó que mientras los patronos le ponen el precio y suben todas las mercancías, éstos y el gobierno pretenden que los trabajadores ofrezcan la mercancía trabajo por debajo de su costo de subsistencia. «Ellos suben los precios de las mercancías y a los trabajadores nos quitan ese derecho con nuestro trabajo».

Terminó planteando que «tenemos un gobierno que actúa contra la clase que lo eligió» y que «los trabajadores no podemos salir de ‘Guatemala’ para ‘guatepeor’ y por eso «no podemos estar ni con Maduro ni con Guaidó», y afirmó que no es con éste último que va a salir Maduro, sino con la fuerza de los trabajadores.

Fue motivo de mucha preocupación lo que se describe como un «estado de necesidad» y «no de bienestar» que «se utiliza para desmovilizar y tratar de desmoralizar a los trabajadores». Al respecto E.S. Afirmó que «con unidad, organización, lucha y conciencia… podemos alcanzar pequeñas victorias para llegar a la gran victoria de la clase trabajadora, y no para esperar a que estos dos se queden con el poder… o que nos lleven a pactos como los que llevaron (históricamente) a la pérdida de proyectos, luchas y revoluciones, desde la indepencia, pasando por la revolución campesina de Zamora, hasta lo que se impuso con el Pacto de Punto Fijo «.

Horacio Silva, dirigente participante por los trabajadores de la Refinería de El Palito (Puerto Cabello, Carabobo), se refirió a las empresas que están cerrando en Carabobo, estado de vieja tradición industrial. Mostró cómo despachan a los trabajadores con una maltrecha liquidación para luego volver a contratar con éstos o con otros, pero bajo condiciones todavía más precarias. «Los patronos se agarran de los instructivos y el Memorando del Ministro del Trabajo para justificar su ofensiva antilaboral contra los beneficios de la contratación colectiva, porque se ha vuelto «un ministerio totalmente patronal» que lo que dispone es «todo beneficioso para las empresas» y malo para el trabajador. «Con el 348 los empresarios son ahora los que meten pliegos de peticiones para justificar despidos», para la destrucción de los beneficos y conquistas de los trabajadores: Citó el caso de Bidgestone Firestones de Venezuela, que afecta a los trabajadores caucheros. También mencionó el caso de las alfareras, de las que quedan cuatro de diez funcionando y ya les quedan muy pocos trabajadores. Denunció interferencias del Sebin y otros cuerpos de seguridad en las actividades sindicales y en las luchas. Por todo ello llamó a «crear una gran estructura sindical». Culminó su intervención diciendo que hoy en día «trabajamos Ad Honorem»; algo que equivale a «salario cero».

Venezuela - sindicalistas II
Eduardo Sánchez, Orlando Chirino, José Bodas

José Bodas (petrolero de la FUTPV), habló de que el gobierno dejó de importar alimentos y medicamentos, en un 80 %, para pagar deuda externa y mientras tanto aplica tablas salariales de semi-esclavitud, para pagar esa deuda, matando al pueblo de hambre». Todo eso, asegura Bodas, «lo decidió por su cuenta, sin imposición del FMI, para quedar bien con los acreedores». «No es un gobierno de izquierda -sentenció- y actúa contra los trabajadores, mientras le entrega el petróleo a las transnacionales chinas, rusas y también norteamericanas, como Chevron, que no está entre las sancionadas por los Estados Unidos a causa de ello» y «China revende el petróleo venezolano». Señala Bodas que «las transnacionales están contentas con los salarios de hambre que le pagan a una mano de obra calificada», y porque «están destruyendo las convenciones colectivas en el sector petrolero».

El dirigente petrolero resaltó el sentido de los sindicatos y de su autonomía frente al gobierno, los patronos y sus partidos, indicando que el rumbo es «movilizarse contra el paquetazo».

Al igual que lo hicieron dirigentes de otros sectores, Bodas también denunció que «el Sebin y la GNB están en la industria petrolera para actuar contra los trabajadores, pero no contra el robo y la corrupción», y que, al revés, lo que hacen es que «acusan al que denuncia».

Arremetió contra el antiguo ministro y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez, hoy señalado por presunto desfalco pero refugiado fuera del país, como «uno de los principales perseguidores de los trabajadores». Con todo esto -dijo- retrocedimos más de 100 años en derechos sindicales y laborales. «Ya quisieran eso un Bolsonaro o un Macri». Terminó con la consigna: «¡Solo la lucha cambia la vida de la clase trabajadora!».

Tony Navas (sector salud), comenzó por decir que estamos ante un «socialismo caricaturesco», rechazando como una falsedad que haya algo de socialismo en Venezuela y que en realidad lo que hacen es que «pasan paquetes neoliberales en nombre del socialismo». Celebró que estuvieran presentes muchos cuadros sindicales, pensando en cómo revertir esta situación. Fustigó a cierta «izquierda que ha dejado de serlo al ponerse del lado del Estado». Denunció que está operando un «chantaje» con el tema de la intervención y la guerra económica para justificar muchas cosas y frenar las protestas. «El 1º de Mayo los trabajadores fuimos desdibujados por ambos lados» (gobierno y oposición de derecha), por lo que llamó a la unidad sobre la base de la autonomía.

Se refirió a la Intersectorial de Trabajadores de Venezuela (ITV) en la que algunos sectores presentes en el Encuentro participaron por algún tiempo, para decir que «fue progresiva pero malograda… porque relegó sus luchas para seguir a un títere (Guaidó)». Pero, aun así, llamó a rescatar el Plan de Lucha original de la ITV, haciendo un reconocimiento a la pelea dada allí por los factores clasistas y de izquierda, entre ellos los dirigentes sindicales del PSL, LTS, el Sindicato de Salud (Sirtrasalud), la JOC, Marea Socialista… con el apoyo comunicacional obrero y popular de Aporrea, La Izquierda A Diario y La Clase.info.

Como se inició con la parte introductoria del evento, se abordaron en cuatro mesas los puntos de discusión: 1) coyuntura nacional, 2) conflictividad social y laboral, 3) programa de lucha y plan de acción de los trabajadores y trabajadoras, y 4) la manera de «recrear» al movimiento sindical.

Conclusiones

Los concurrentes acordaron crear una coordinación sindical (provisoria) para comenzar a orientar y organizar el trabajo y las acciones de lucha. Las conclusiones de las cuatro mesas erán publicadas por completo una vez culminen los documentos de sistematización y sean revisados por la coordinación.

La Mesa 1, que evaluó la coyuntura expuso en la relatoría que ésta se caracteriza por:

Enfrentamiento internacional e interimperialista entre EEUU y Rusia y China, que en Venezuela se refleja en una polarización política entre la burguesía tradicional representada por Guaidó y compañía y una burguesía emergente que es popularmente conocida como «boliburguesia». Ambas burguesías tributan al capital, y la burocracia en el gobierno tiene características de antiobrera, represora , autoritaria y antidemocrática, que somete al pueblo y a los trabajadores al hambre y a la miseria, a niveles inéditos en la historia contemporánea. Situación que aprovecha la burguesía tradicional, que quiere hacerse del poder a través del golpe y que es abiertamente injerencista, intervencionista, liquidadora de la clase trabajadora y el pueblo pobre.

Es vital levantar la bandera en contra del injerencismo (pro-estadounidense que) que se aglutina alrededor de Guaidó, pero sin ningún apoyo ni confianza para el gobierno de Maduro.

Resolución aprobada:

1.- Levantar una alternativa autónoma e independiente, de los trabajadores, antimperialista, anticapitalista y antipatriarcal, para luchar en contra del intervencionismo y el golpismo, y contra el plan de ajuste llevado adelante por el gobierno de Maduro, que ha sometido al pueblo trabajador a la polarización, al hambre y a la miseria.

2.- La conformación de un equipo, comité, coordinación o articulación unitaria, para que le dé continuidad al plan de lucha y programa que emanen de este encuentro y que apunte, entre otras tareas, a realizar un encuentro nacional de trabajadores que aporte en la construcción de organismos de lucha y un plan de emergencia (en favor de los trabajadores y el pueblo).

En la Mesa 2 se discutieron elementos programáticos contentivos de las principales reivindicaciones de la clase trabajadora en materia de salario, beneficios laborales, contratación colectiva, los nefastos instructivos y memorando del Ministerio del Trabajo que destruyen las condiciones de trabajo y de vida, el tema de la precariedad del empleo, la lucha contra los despidos directos e indirectos y contra la persecución laboral, la represión antisindical, la liberación de dirigentes sindicales presos, y la violación de los derechos sindicales en general. Estos puntos programáticos abarcaron también los reclamos democráticos de la clase trabajadora en cuanto al modo de conducción del Estado y del país, así como la economía, respecto a la cual se propone el diseño de planes de emergencia contra la crisis y en favor de los trabajadores, en lugar de estar en favor de los intereses patronales, burocráticos y de las transnacionales o potencias imperialistas, del pago de una deuda externa corrupta y de la entrega de los recursos del país. Se resaltó el rescate de la idea del control obrero en oposición al control burocrático por parte del Estado o de la privatización de empresas, así como en aquellas empresas abandonadas por los patronos.

En esta mesa se propuso respaldar el Amparo introducido en el TSJ (Tribunal Supremo de Justicia) para reclamar que se aplique el Art 91 de la Constitución, según el cual el Salario Mínimo debe estar en correspondencia con el costo de la Canasta Básica (Familiar) y no como lo están haciendo el gobierno y los patronos que lo fijan incluso muy por debajo del costo de la Canasta Alimentaria.

También se acordó en esta y otras mesas el apoyo a los medios de comunicación obreros y populares como Aporrea.org que se encuentra bloqueada por el gobierno, haciendo extensiva esta defensa a otros medios alternativos que acompañan a los trabajadores (como La Izquierda Diario y LaClase.info). En este sentido se acogió el llamado a acompañar a Aporrea el martes 14 a reclamar contra el bloqueo en la CANTV (visita colectiva fijada para ese día a las 10 AM, en la Avenida Libertador, Caracas).