Nicaragua – La otra muerte de Sandino. [Julián Pérez Rodríguez]

Apenas tenía 22 años y era, según cuenta Gabriel García Márquez, «una muchacha muy bella, tímida y absorta, con una inteligencia y un buen juicio que le hubieran servido para cualquier cosa grande en la vida». Lo más grande que decidió, y por lo que dejó la carrera de Medicina, fue la lucha guerrillera.