Dilma cayó, Temer asumió y un clima de incertidumbre se cierne sobre el país. Si, de un lado, las manifestaciones que respaldaron el impeachment no se repitieron siquiera mínimamente después del logro, de otro lado, la reacción de los sectores progresistas, dentro y fuera del lulismo, todavía es confusa. Para analizar el intrincado momento histórico, Correio da Cidadania conversó José Correia Leite que liga la instabilidad brasileira a un cuadro mundial no muy diferente de crisis sin soluciones...