En Europa ya no se ignora la existencia de un conflicto entre Catalunya y el Estado español. Carles Puigdemont se ha convertido, a pesar de que explica poco y mal la estrategia que pueda tener para el futuro, en una personalidad más conocida que bastantes gobernantes del viejo continente. Medios de comunicación de diferentes países han informado sobre el ‘procés’, las movilizaciones soberanistas y la represión gubernamental y judicial con un nivel de profesionalidad olvidado por la mayor parte de periódicos, radios, televisiones y agencias de noticias de ámbito estatal...