La Historia como alucinación: cuando Stalin y Eisenstein reinventaron una revolución

El film fue pionero en una serie de cosas, aparte ya del montaje, como la audaz yuxtaposición de imágenes, por la cual se hizo célebre Eisenstein. El mismo Stalin interfirió desde muy temprano, visionando un primer montaje en bruto del material y exigiendo que se eliminaran las escenas con Trotski e incluso con Lenin. Y se convirtió así en el primer productor autoritario, en un nauseabundo paralelismo con su censura, su tiranía y sus asesinatos masivos...