Uruguay: Las mujeres rurales también reclamaron lo suyo

Hace años que dormita, no duerme, y antes de que suene el despertador a las 5.00, ella ya está en pie. Los días que le toca ayudar en el tambo, se despierta, incluso, antes. Se pone las botas, se ata el pelo, prepara el mate y ve cómo se esclarece el cielo...