Es imposible estudiar el terrible final del gueto de Varsovia, y del resto de Varsovia, sin apretar los puños y sentir un brote de ira y odio contra las fuerzas que le dan vida a semejante horror.
Es imposible estudiar el terrible final del gueto de Varsovia, y del resto de Varsovia, sin apretar los puños y sentir un brote de ira y odio contra las fuerzas que le dan vida a semejante horror.